Blockchain III: transacciones electrónicas
Escribe Juan Rivadeneyra, Director de Marco Regulatorio de Claro
Actualmente el funcionamiento de las denominadas “criptomonedas”, tales como Bitcoin o Ethereum, se desarrolla precisamente dentro del entorno provisto por Blockchain, de tal manera que se certifica la operación y se vuelve inalterable, evitando que la moneda pueda ser falsificada o gastada dos veces; pero sobretodo, bajo una operatividad muy eficiente y más rápida en comparación al sistema “tradicional” del mundo analógico. Por ejemplo, si Usted necesita hacer una transferencia de dinero a otro país bajo el método tradicional, tendrá que emitir una orden a su banco para que ésta a su vez transmita el mensaje al banco intermediario o corresponsal y a su vez éste al banco receptor donde el beneficiario de la transacción tiene una cuenta, previa liquidación de las cuentas pendientes entre todos los intervinientes. Todo este proceso puede tardar entre 48 y 72 horas. Bajo la operativa de Blockchain esta misma operación tomaría minutos. Es por eso que, según recientes estudios, se anticipa que para el año 2020, el 80% de las entidades bancarias y financieras habrán adoptado el Blockchain.
Las características de Blockchain también se presentan como idóneas para prescindir en ciertas transacciones de la intervención de Notarios Públicos que certifiquen un acto, un pago o la ejecución de un contrato, puesto que el sistema per se registra y otorga las mismas (y hasta mayores) seguridades que aquellos.
Se menciona así como una de sus aplicaciones la función implícita de Blockchain como “notario distribuido” en distintos tipos de transacciones haciéndolas más seguras, baratas y rastreables.
Otras aplicaciones del Blockchain que se encuentran en pleno desarrollo son aquellas empleadas para sistemas de gestión de activos digitales, contratos inteligentes (“smart contracts”), almacenamiento de datos o documentos certificados digitalmente, registros de propiedad mueble o inmueble, registro y protección de propiedad intelectual, registros para el Internet de las Cosas (IoT), auditorías de la cadena de suministro para bienes de consumo, implementación de sistemas contra el lavado de dinero, entre otros.