Fernando Carbajal, Fundador y Gerente General de Mail On Bike, el primer servicio de mensajería en bicicleta del Perú, explica el impacto socioambiental de impulsar el uso de movilidad sostenible en el país.
¿Sabías que la primera ciclovía del Perú estuvo en la actual vía Panamericana Sur? Fue inaugurada en 1989 como parte de la remodelación que se realizó a esta vía y se iniciaba en el cruce de la Av. Javier Prado con la carretera Panamericana Sur, cuando todavía no existía el actual intercambio vial. Consistía en un carril dibujado en la sección auxiliar de la vía y corría a ambos sentidos de la carretera, una en cada sentido de la vía, y llegaba hasta el puente Atocongo. El incremento del tráfico y el tiempo la llevaron al olvido; y posteriormente, la Av. Arequipa pasó a ser la protagonista de esta distinción. Luego con el tiempo otras ciclovías más, pero desarticuladas y sin conexión entre ellas.
Salvo estas excepciones, el Perú no se caracterizaba ni destacaba en la región; como de pronto lo hizo Colombia desde el 2015, en promover el uso de la bicicleta como una alternativa de movilidad sostenible y práctica para el transporte de personas para realizar actividades productivas; ya sea para ir a trabajar, realizar compras o como un medio para generar ingresos como en el caso de la mensajería.
El distrito de San Borja tuvo a nivel local un rol protagónico durante muchos años en el impulso del uso de la bicicleta, llegando a implementar ciclovías y hasta un sistema de préstamo de bicicletas para los residentes del distrito. La Municipalidad de Lima Metropolitana, a través de su Gerencia de Transporte No Motorizado, realizaba los mejores esfuerzos para que más distritos incorporarán a la bicicleta en un lugar destacado dentro de su habilitación urbana, pero no siempre se conseguía el entusiasmo de los alcaldes de turno, por lo que nuestra ciudad, seguía sin articular las ciclovías de manera que resultaran una alternativa al creciente tráfico. El sueño de convertirnos en una “Holanda” de América Latina, se hacía lejano. Para mí, un entusiasta ciclista desde mis épocas de estudiante universitario y luego como emprendedor en bicicleta, me resultaba frustrante la falta de voluntad política para impulsar este medio de transporte que de acuerdo a “mi visión”, era el paso natural y evidente.
"Una persona que recorre 10 km en un trayecto, le ahorra al planeta 3 kg de CO2. Es la cantidad ahorrada si hubiera realizado este trayecto en un vehículo motorizado”.
La bicicleta como alternativa de movilidad sostenible
El día de hoy resulta que movilizarnos en bicicleta no sólo alivia el tráfico y controla la expansión de la pandemia, sino que nos regala un aire más limpio a todos, un ambiente con menos ruido y mucho más allá. Todos los nuevos y antiguos usuarios de la bicicleta, vivimos una vida más sana, fortaleciendo pulmones, articulaciones y reduciendo las afecciones derivadas del sedentarismo; dependemos menos de los servicios de salud, de tal manera que los descongestionamos para que se enfoquen en quienes realmente lo necesitan y generamos ahorros a los servicios públicos en general.
Si lo ponemos en números. Una persona que recorre 10 km en un trayecto, le ahorra al planeta 3 kg de CO2. Es la cantidad ahorrada si hubiera realizado este trayecto en un vehículo motorizado. Imagina que lo haga por 100 días. Estamos hablando de que el impacto de una sola persona es de 300 kilogramos menos de CO2 en el ambiente. Luego imagina esto, los vehículos motorizados también generan ruido, incluso a veces superan los 55 decibeles, que es el mayor nivel de ruido que la OMS recomienda como tolerable para un ser humano saludable (una moto emite entre 70 y 90 decibeles de ruido, nueva de tienda). Este recorrido de 10 km puede ser realizado en unos 40 minutos. Ahora multiplícalo por los mismos 100 días. Se convierten en 4 mil minutos de ruido o unas 67 horas de ruido permanente, que no sólo afectan al que conduce, sino también a las personas alrededor.
Andar en bicicleta por nuestra salud y por el ambiente
Así como estos beneficios cuantificables, existen además otros beneficios que de pronto no son tan fáciles de medir; como por ejemplo, las mejoras de salud en el ciclista, ahorro de dinero en gastos de transporte y de salud, mejor humor y mayor ánimo para trabajar o para relacionarte con otras personas, nuevas experiencias conociendo la ciudad de una forma distinta, o incluso animándote a ir a lugares que antes no te hubieras atrevido a ir, especialmente en bicicleta, nuevos hábitos alimenticios y un largo etcétera.
En este punto puedes darte cuenta que los beneficios son tantos, que piensas ahora ¿cómo fue que no lo hicimos antes? ¿Cómo fue que no tomamos estas decisiones antes? Ciertamente no hay manera de responderlo, pero ya estamos acá y lo que nos toca es seguir animando a otros a disfrutar de estos beneficios, convertirnos en actores responsables de la infraestructura vial, y encontrar nuevas y más maneras de reducir nuestro impacto ambiental con otras acciones complementarias: compostaje, reciclaje, re-uso, etc.
La decisión es nuestra ahora, como nunca antes, ahora cada uno de nosotros somos protagonistas del cambio y es nuestra responsabilidad mejorar el mundo en que vivimos.
Mail on bike: mensajería en bicicleta
Mail on bike es el primer y más grande servicio de mensajería en bicicleta en el Perú, especializados en el transporte de productos y documentos para negocios on-line, tiendas físicas, profesionales independientes y personas naturales. No somos una aplicación, somos personas reales trabajando contigo para ayudarte a crecer en tu negocio y cumplir con tus entregas a tiempo: sin tráfico, sin contaminar, sin emisiones de CO2 y sin generar ruido.
Nuestros mensajeros están preparados para ir a tu casa, tienda u oficina, recogemos tu encargo y lo llevamos a donde tú nos digas. Puedes contactarnos por WhatsApp al 967238429, al correo pedidos@mailonbike.com, o encontrarnos en Facebook o Instagram.