Por segundo año consecutivo, los colaboradores de Claro pusieron manos a la obra para contribuir con el proyecto “Casa Caliente Limpia”, una iniciativa impulsada por la Asociación Kusimayo en Puno.
“Cuando vi a los niños correr para abrazar a mis compañeros, volví a sentir la satisfacción de aquél que da sin esperar nada a cambio. La sonrisa de aquellos pequeños y la alegría de sus familias son la más grande retribución que podemos obtener”
El testimonio de Cristina Corales, encargada de los programas de responsabilidad social de Claro, refleja sin duda el sentimiento de todos los voluntarios que llegaron hasta el distrito de Caminaca en Puno, para ayudar nuevamente a las familias afectadas por el implacable frío que golpea esta zona del país durante la temporada de invierno.
Ella, junto a otros compañeros que integran la Red de Voluntarios Claro (RVC), fueron una vez más principales promotores de una campaña de recaudación interna que permitió reunir más de 83 mil soles para cumplir el sueño de muchos niños de tener una “Casa Caliente Limpia”.
De esta manera, por segundo año consecutivo, gracias al aporte económico de la empresa y las donaciones de sus empleados, Claro volvió a ser parte de un proyecto que continúa mejorando la calidad de vida de muchos peruanos.
Abrigando un sueño
Empleando tecnología desarrollada por la PUCP, el proyecto “Casa Caliente Limpia” de la Asociación Kusimayo busca mejorar las condiciones de las viviendas en las zonas altoandinas con el objetivo de generar y mantener el calor en su interior. Dichas mejoras permiten incrementar la sensación térmica en la casa hasta en 12ºC, lo que resulta vital en estas zonas del país donde la temperatura puede descender más de 10ºC bajo cero.
“Este año decidimos apoyar nuevamente el proyecto ‘Casa Caliente Limpia’ puesto que hemos sido testigos de su impacto positivo en la calidad de vida de las personas, principalmente en los niños”, señala Cristina. “Todos están muy contentos con la ayuda. Incluso nos contaron que ahora usan menos frazadas para dormir y sufren menos enfermedades respiratorias”, comenta emocionada.
Además de apoyar en trabajos de acondicionamiento de las viviendas, los voluntarios de Claro prepararon dinámicas, charlas y juegos para los más pequeños. “En medio de tanto frío, les traemos mucho calor humano y abrigamos sus hogares con la mejor energía, el amor”.
Esta vez fueron 19 familias beneficiadas por la participación de Claro en el proyecto “Casa Caliente Limpia”. Recuerda en este artículo cómo empezó este gran trabajo en el 2016.