¿Sabes cómo se iniciaron las plataformas de video on demand? Esta es la historia del streaming y de qué forma ha ido evolucionando a través del tiempo.
El streaming de video on demand ha cambiado la industria del entretenimiento para siempre, incluyendo tanto a la televisión como al cine. Según lo reportado por la firma de medición de audiencias Nielsen, el uso del streaming aumentó más del 21 % entre mayo de 2021 y mayo de 2022.
En la actualidad, la mayoría de personas se encuentran familiarizadas con servicios como Netflix, Disney+, HBO Max, Prime Video o Claro video, en donde el usuario tiene total potestad para decidir qué contenido desea consumir.
Sin embargo, muchas de ellas no conocen la historia del streaming y de qué forma ha ido evolucionando desde hace más años de los que uno esperaría. A continuación, haremos un breve repaso por el camino que ha seguido esta tecnología.
Origen y primeros pasos del streaming
Si bien estas plataformas se han popularizado en la última década, lo cierto es que esta tecnología comenzó a andar en 1920 cuando Muzak, un sistema de transmisión y distribución de señales a través de líneas eléctricas, fue inventado por el estadounidense George Owen Squier. En un inicio fue creado para difundir música, pero rápidamente fue desestimado debido a la infraestructura eléctrica de la época y al auge de la radio comercial.
Si bien el concepto fue interesante en aquel momento, no sería hasta la década de 1990 cuando el streaming logró tomar forma. En 1993, la red virtual Multicast Bone (MBone) −red de internet de alta velocidad que se concibió para transmitir conferencias académicas− empezó a emitir contenido en directo y gratis como conciertos u otros tipos de show.
Si bien algunos reconocen a RealAudio Player de 1995 como la primera plataforma de streaming, este solo supondría una pequeña muestra de lo que la verdadera revolución traería consigo. Diez años después, el mundo conocería a YouTube y desde entonces todo sería distinto.
YouTube y el gran cambio
Cuando Steve Chen, Jawed Karim y Chad Hurley −tres exempleados de PayPal− decidieron lanzar el sitio web youtube.com en 2005, pocos se imaginaban el impacto que traería consigo la plataforma de videos. Un año más tarde, en 2006, los primeros contenidos comenzaron a publicarse y los creadores pioneros la impulsaron hasta que se convirtió en el coloso que atrajo la atención de Google, firma tecnológica que terminó comprándola ese mismo año.
Hoy en día, YouTube es uno de los motores de búsqueda más grandes de internet y cuenta con unos 2,000 millones de usuarios activos al mes, de los cuales cada uno consume contenido una hora y 15 minutos en promedio todos los días.
Si bien YouTube no nació como un servicio de transmisión, lo cierto es que ahora cuenta con herramientas que utilizan esta tecnología para que sus usuarios puedan realizar sus propios directos. Sin embargo, el concepto de streaming de video on demand que todos conocemos se establecería con otro nombre: Netflix.
Netflix y el boom del streaming de video on demand
Los orígenes de Netflix estuvieron muy alejados de su estado actual. La compañía se creó en 1997 como un establecimiento de alquiler de películas al estilo Blockbuster, con la gran diferencia de que ofrecía un modelo de suscripción para enviar dichos filmes por correo postal.
En 2007, ante la caída del resto de sus competidores, incluyendo al todopoderoso Blockbuster, y reconociendo que el alquiler de casetes, DVDs o Blu Ray estaba decayendo, decidió cambiar su modelo de negocio para posicionarse como un pionero y líder de los servicios de streaming de video on demand.
Ahora que estamos en el auge de esta industria, diversas plataformas se han ido sumando. Competencia saludable para los consumidores, que sin duda continuará durante los próximos años. Tal parece que estamos lejos de que esta fiebre se termine.